Eran las nueve de la noche de ayer, sábado 9 de abril, cuando se abría el cancel del pórtico de la parroquia de San Juan Bautista, para dar paso a la procesión del Santísimo Cristo de la Salud.
Previamente, a las siete y media de la tarde, comenzaba la función solemne en el interior del templo, presidida por la Hermandad del Santo Entierro, que realizó en el marco de la celebración la imposición de hábitos a los nuevos hermanos, y el relevo del Hermano Mayor. Esta corporación del Viernes Santo villero, no fue la única que acompañó a la imagen del Cristo en su recorrido, ya que también contó con la presencia de la Esclavitud del Santísimo Cristo a la Columna, los diferentes Hermanos Mayores de las cofradías y hermandades de la parroquia, el clero y autoridades, y la Banda de Cornetas y Tambores de San Juan Bautista.
De especial relevancia fue el bello exorno floral del trono del Señor, adornado con astromelias moradas, y el terno de brocado morado que lució el cuerpo de acólitos, que se ha restaurado recientemente.
I. G. S.
