Desde tempranas horas de la tarde la
afluencia de fieles y devotos llenaba el templo parroquial de San Juan
Bautista, en el que, a las 8 de la tarde, comenzaba la Solemne Concelebración
Eucarística, presidida por el Rvdo. D. Víctor Manuel Oliva García, Ecónomo Diocesano y Párroco de San Lázaro, de San Cristóbal de La Laguna. A su vez, la Coral «Liceo de Taoro» y «Ab Libitum
Quintet Bass», de La Orotava, colmaron de armonía musical la
celebración.
Finalizado el sacro Oficio, los innumerables cirios, que titilaban a lo
largo del enmarañado itinerario, prendían de luz el camino para la
Santísima Virgen, mientras que en el interior del templo el Ilmo. Sr.
Alcalde D. Isaac Valencia Domínguez le cedía como cada año el báculo como Celestial Alcaldesa de la Villa. El estandarte de la Venerable Cofradía de Nuestra
Señora del Carmen cruzaba el dintel de la puerta principal de la
parroquia las 21:33 horas de la noche, y así, más tarde, la Regidora divina salía a la plaza de San Juan Bautista bajo los sones de El Relevo, interpretado por la Banda de Cornetas y Tambores de San Juan Bautista y la banda de música de la Agrupación Musical Orotava.
La Perla del Carmelo fue recibida por un suave y fino manto de pétalos
de rosas que en cada calle caía como rocío de la mañana, tejiendo un hermoso telón de
cariño y devoción hacia la Virgen a lo largo de todo el itinerario. Otro año más, la Calle Nueva la recibió con el color de los fuegos de artificio y una monumental petalada que terminó arrancando el aplauso y los vivas más sentidos a la Santísima Virgen.
Tras su largo y pausado caminar, la Celestial Alcaldesa retornaba a su
parroquia, entrando de nuevo en la Plaza de San Juan a las 23:42 bajo
los sones de Al Cielo con Ella. Ya en la plaza se entonó el canto de la Salve, cerrando los cultos en honor a la Santísima
Virgen del Carmen para la jornada festiva de ayer.
J. H. M.
