Finalizando el mes de noviembre nuestros ojos vuelven a mirar hacia la Villa de Arriba, y más exactamente a los límites del casco histórico por su zona sur, allí se conserva casi desapercibida para la mayoría, uno de los templos más antiguos de nuestra Villa.
Este templo fue fundado por uno de los mayores terratenientes de la isla, Antonio de Franchy y Lutzardo, comerciante genovés, y su esposa, en 1559.
La ermita de Santa Catalina, enclavada en medio del cañaveral de dicho hacendado y muy cercano al aserradero, al principio de la ruta de molinos que se desarrollaban por todo el municipio, no es de extrañar, que este templo se dedicara este a esta antiquísima mártir pues es protectora de negocios y trapiches.
Una devoción aún hoy particular, pero que ha calado muy hondo en el sentir de la gente, muy especialmente en el corazón de las gentes de la Villa de Arriba y más concretamente en los que se enorgullecen de vivir en los aledaños de este recinto sacro. La estrecha historia de esta zona, sus devenires, sus cambios y progresos han estado siempre ligados a la imagen y ermita de Santa Catalina, siendo icono y foco de las plegarias de sus fieles devotos.
Ya se conoce recorrido procesional aprobado por el episcopado nivariense desde 1888, dando así a entender, que a pesar de su concepción y estatus de privacidad, la relación con la Iglesia es muy estrecha, pues así de estrecha es la devoción de las gentes de Santa Catalina. Su recorrido procesional siempre iba a hacer estación al templo parroquial de San Juan Bautista como así lo hiciere la cercana Virgen de La Piedad. Muchos años recorrieron juntas las calles de la Villa.
Ya son más de 450 años de historia, ya son muchos los capítulos que ha escrito en los anales del municipio, ya son muchos los altibajos de esta devoción, con períodos de mucha y fructífera vida, contrarrestados con el cierre indefinido del templo y su progresivo abandono, con el resurgir de sus celebraciones y cultos religiosos con la celebración de las “Fiestas de Santa Catalina Mártir” , ya perdidas al igual que su procesión por las calles de la zona (1990), o con sus últimos capítulos de historia con la celebración del 450 aniversario de su construcción en el año 2009.
Un grupo de devotos de esta Santa mártir, han cogido el testigo de las generaciones que nos han precedido. No han querido dejar caer, a pesar de mil y un impedimentos, esta devoción tan característica de la Villa, dando a conocer el legado de una familia, que ha pasado de generación en generación, pero que ello no ha privado al pueblo llano de gozar de ese patrimonio religioso acrecentando así ese cariño y sentimiento de quienes han nacido bajo el amparo de su divina protección. No han querido que esta exquisita ermita del siglo XVI, caiga en el olvido por su lejanía o por su abandono tanto particular como eclesial. No, este grupo está animado y desea luchar por este templo, para que no sufra lo que muchos pequeños templos de la Villa, que su descuido ha traído consecuencias fatales tanto para sus estructuras arquitectónicas como para sus progresivos declives devocionales. Pues estas devociones tan arraigadas en la sociedad, estás vivas, y como tal pueden caer en el olvido hasta morir, valga nombrar las ermitas de San Felipe Neri o San Sebastián que hoy son meras edificaciones artísticas y patrimoniales pero que en nada conservan el sentimiento y origen primigenio para el que fueron concebidas, como es dar mayor gloria a Dios por medio de la vida ejemplar de los santos.
Tenéis la oportunidad el próximo día 25 de noviembre, desde tempranas horas de la mañana, de apreciar este rico patrimonio villero, como así los días sucesivos. No pierdan la oportunidad de conocer este legado y su historia. Y más importante aún es seguir con esta tradición, que pervive, acudiendo a su veneración pública con la Solemne Concelebración de la Eucaristía el susodicho día 25 de noviembre a las 8 de la tarde, la cual será acompañada por el coro de Nuestra Señora del Carmen Coronada.
No dejéis pasar esta ocasión de ir a visitar este rincón ya que sólo se abre al culto los días de la onomástica de su Sagrada Titular. Vale la pena conocer nuestra historia.
G.C.H.